Son muchos los reacios a cambiar su vehículo por uno eléctrico. Yo estoy en este saco siempre y cuando hablemos de distancias largas. En España aún no contamos con numerosas localizaciones de estaciones de carga eléctrica que nos permitan recorrernos la península sin tener que planificar y desviar nuestro recorrido.

Nos guste o no, cada vez son más las restricciones que nos imponen para circular en la almendra de la ciudad, y si pensamos en desplazamientos diarios urbanos, los vehículos eléctricos son una opción estupenda. En esta prueba, os detallo mi experiencia con la Vespa Elettrica, la vuelta de tuerca de la clásica entre las clásicas.

Esta Vespa cuenta con 2 kw (2 cv aprox.) de potencia pero tiene picos de hasta 4 kw (5 cv aprox.). Sus baterías se regeneran cuando dejamos de acelerar. La autonomía está en torno a 100 km y se carga en unas 4 horas. Y aquí tenemos nuestro mayor problema, como con todo vehículo eléctrico: ¿dónde la cargo?. Pues bien: si no te acabas de comprar una vivienda de obra nueva con toma incluida en tu garaje (como es normal), puedes echar mano de estaciones urbanas (como la de la calle Fuencarral, en Madrid) o de estaciones de centros comerciales. Hay apps tanto para iOs como para Android que te indican en el mapa las estaciones disponibles. Pero cuidado: el enchufe de la Vespa es convencional, y los de los cargadores, trifásicos. Una de las pegas que le saco a la Vespa Elettrica es la imposibilidad de extraer los módulos de las baterías para cargarlos en casa.

Ahorro a largo plazo

El precio de la Vespa Elettrica es de 6.390 euros. Hay que tener en cuenta que el gasto en la recarga de la batería es bastante menor que en un vehículo de combustión. Tampoco necesita el mismo mantenimiento: solo tendremos que vigilar ruedas, frenos y el estado de la batería. Las baterías de los vehículos eléctricos tienen una vida útil limitada al 100% de su capacidad. Piaggio afirma que tras 1000 recargas de la batería, ésta se queda con el 80% de su capacidad.

Circulando con la Vespa Elettrica por ciudad

Con solo 102 kg y todo el peso abajo la Vespa es hiper manejable. En esta prueba no he llevado paquete pero me temo que sus prestaciones, con el peso de una persona más, quizá se verían reducidas. Y es que la velocidad máxima de la Vespa y cuesta abajo han sido 54 km/h en el modo power, 34 en el modo eco (la moto está limitada a esa velocidad).

En una ciudad grande como las capitales de provincia, circular a 34 km/h es algo inviable e incluso peligroso. Está claro que en ciudad no se pueden superar los 50 km/h pero no estaría mal contar con más velocidad punta por si queremos ir de Leganés a algún municipio cercano como Getafe por una via irterurbana. En este sentido estamos limitados a no salir de nuestra ciudad o si lo hacemos, estaremos totalmente expuestos al resto del tráfico.

La Vespa Elettrica cuenta con un hueco debajo del asiento para, en principio, un casco jet. Mi casco integral, aunque llevo un montón de accesorios, no cabe en el hueco. El asiento es alto y cómodo, como en todas las vespas.

El conjunto de luces led cumple muy bien. El freno trasero, de tambor, frena bastante mejor que el delantero. En este último contamos con ABS. La versión L1, 200 euros más económica que la L3, no equipa freno combinado.

Sin perder los detalles

El punto fuerte de esta pequeña son los detalles. Acabados estéticos como las franjas en color de la versión plateada utilizada en esta prueba, con tiras del mismo color en las llantas. Los detalles en cromado nos acompañan en todo el conjunto desde los puños hasta el propio faro trasero.

Esta moto está hecha para ser el más chulo o la más chula de la ciudad, y para ahorrar a la larga en combustible. Sin embargo se echa en falta la posibilidad de realizar desplazamientos interurbanos (ir al pueblo de al lado, ir al centro comercial…) con seguridad. Por lo tanto tenemos un publico muy limitado, y es el de usuarios urbanos que prefieren realizar un desembolso inicial mayor y ahorrar en mantenimiento y combustible. Si es tu caso, no se le puede sacar ninguna pega a la Vespa Elettrica. Bueno, sí: el hecho de que llevarás la scooter más bonita de barrio. Y… ¡ya sabemos las miradas que eso conlleva!

Vespa Elettrica

Pros

Comodidad y facilidad de uso

Conjunto de frenos y luces

Ahorro a la larga

Contras

Velocidad punta

Potencia

Baterías no extraíbles