Muchas veces hemos soñado con ese premio del euromillones, de la lotería, con una herencia de un tío de América… Para comprarnos una casa, algún que otro coche llamativo, viajar por el mundo… Al propietario de este Ferrari, no sabemos si le habrá tocado la Diosa Fortuna con su varita mágica. Lo que es cierto es que se ha gastado la friolera de más de 40 millones en su coche, una locura.
Este Ferrari 250 GTO se convirtió en el coche más caro vendido en una subasta pública, superando así los 34,7 millones que se pagaron por otra unidad igual en 2014. La subasta tuvo lugar en el concurso de elegancia de Pebble Beach en California.
El 250 GTO de Pebble Beach fue vendido en el 2000 por 11,86 millones de dólares. Tiene el número de chasis 3413 GT y es la unidad número 3 de las 36 que se produjeron de este modelo. Fue el primero en contar con una carrocería de Serie I, con una entrada de aire más pequeña para el radiador o con conductos de ventilación de frenos más estrechos.
Este vehículo cuenta con un extenso palmarés deportivo, con victorias en la Targa Florio en 1963 y 1964, un campeonato italiano de GT en 1962… El 250 GTO era un coche de carreras excepcionalmente capaz. A la hora de su introducción era (dependiendo de la relación del cambio) muy probablemente el coche más rápido en cualquier pista de la categoría.
El coche debutó en las 12 Horas de Sebring en 1962, conducido por el piloto estadounidense Phil Hill y el piloto belga Olivier Gendebien. Aunque tuvo problemas técnicos, igualmente terminó segundo, detrás de un Ferrari 250 Testa Rossa.
Fue diseñado por Sergio Scaglietti y cuenta con motor V12 frontal longitudinal de 3,0 L, de 300cv transmisión manual de 5 velocidades y un peso de 1050kg, alcanza una velocidad máxima de 280km/h, sin duda unas prestaciones extraordinarias para un coche de carreras de aquella época y un capricho para cualquiera, en cualquier época.
Hacer Comentario